¿Qué es un embarazo psicológico?
La pseudogestación es lo que coloquialmente se llama “embarazo psicológico” Sin embargo no es nada psicológico, sino que es un estado fisiológico y, por lo tanto, normal en la perra (50-70% de las perras)
La pseudogestación se produce en hembras después del celo, en las que se produce un desajuste hormonal: baja la progesterona y aumenta la prolactina.
En la Naturaleza es un proceso normal, y a veces incluso es útil en las manadas para ayudar en la cría de cachorros.
¿Cuándo le puede pasar?
Ocurre a partir del 1,5 o 2 meses de haber pasado el celo, aunque puede variar entre 3 y 14 semanas.
Normalmente una perra que ha sufrido una vez de pseudogestación la seguirá padeciendo después de cada celo.
¿Qué síntomas puedo notar?
La perra tendrá los mismos síntomas de una gestación real.
- Hinchazón de las mamas y el abdomen.
- Aparece leche en las mamas.
- Cambios de comportamiento: agitación e nidificación, adoptan objetos o muñecos si fuesen sus cachorros, algunos casos, agresividad maternal. Esta agresividad es propia de las hembras que protegen a sus crías y es natural.
- Mamitis.
- Disminución del apetito.
Si le pasa a mi perra, ¿qué debo hacer?
Acudir al veterinario para evaluar el estado de la perrita
- En casos leves, puede que no necesite tratamiento. Sólo vigilancia por si se agravase. Es un proceso que se solucionará por sí mismo tras dos o tres semanas.
- Casos más graves: en los que haya mucha leche, mucha inflamación de mamas o fuerte cambio de comportamiento es recomendable aplicar tratamiento veterinario
Tratamiento
Cada caso ha de valorarse de forma individual por el profesional pero de forma casera se pueden aplicar algunas recomendaciones:
- Evitar tocarle las mamas e impedir que ella misma se esté chupando ya que así se estimula la bajada de la leche.
- Quitarle objetos o muñecos a los que “adopte “ en este estado.
- Aumentar el ejercicio diario durante esas semana.
Los embarazos psicológicos en las hembras suponen una pérdida de bienestar muy importante además de enfermedades graves:
Esto me hace recordar a una mascota que tuve de niño.
Era un gato llamado Foxy de raza chartreux
que adoptaron mis primos en Gipuzkoa. Una
mascota encantadora.